El amplio consenso a nivel internacional sobre la necesidad de conservar nuestro planeta azul y su biodiversidad podría verse entorpecido gravemente por la crisis sanitaria y podría llevar a un deterioro medioambiental incluso superior al de antes de la crisis. El cambio climático aún se mantendrá por muchas décadas, pero los efectos del cese de actividad humana han demostrado cómo se puede evitar. Las entidades firmantes señalan que tenemos que seguir esta enseñanza y aprovechar las nuevas oportunidades para reorientar la inversión para la recuperación económica.